SILOÉ (2016) La Verdad

 

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Que el Let's Festival de Barcelona que se celebra en la sala Salamandra de L'Hospitalet de LLobregat es una mina inagotable de perlas underground dispuestas a ser descubiertas por el gran público, es algo innegable. Este año teníamos a Love Of Lesbian (con las entradas agotadas mucho antes del concierto), Los Punsetes,  Nacho Vegas, Dinero o Joana Serrat como artistas grandes y sobradamente consagrados para colocar en el cartel algunos de los nombres más conocidos del actual indie nacional, pero si rebuscamos, rascamos e indagamos en los nombres menos conocidos como los de Guadalupe Plata, Grises, Los Vinagre, Los Ganglios, Presumido, Nudozurdo, El Último Vecino, Tórtel o, el que nos ocupa, Siloé nos podemos llevar más de una sorpresa agradable con la inagotable y soprendente paleta estilística capaz de ofrecernos la gente del Let's Festival.

 

Finalmente este año solamente podré acercarme a ver a Los Punsetes y Los Ganglios (ambos el mismo día por tan sólo 12 euros) en una velada que se presenta épica dentro de un Festival que dura prácticamente dos meses con fechas que se extienden a todos los fines de semana de sus 8 semanas de duración. Y de la misma manera que ya hicieron el año pasado, a todo el mundo que compra entradas para el Festival acaban regalándole entradas para otros conciertos del Let's, me han vuelto a llegar un par de entradas gratis para el concierto de Siloé con Tórtel, un combo de sobras interesante para intentar acercarse esta noche a la Salamandra.

 

De sobras es sabido que bandas como Love Of Lesbian, Vetusta Morla o Supersubmarina han puesto al indie nacional de nuevo en el candelero (después de que Los Planetas les allanaran el camino a todos) y que de todos ellos han salido múltiples imitadores (algunos con más suerte que otros) con lo que el indie nacional se encuentra en un momento sumamente dulce y productivo. Bandas como Izal o Dinero han aprovechado el tirón de manera inteligente y se han subido a la ruleta de la fortuna impulsada por las bandas que os he comentado y Siloé toma esa misma línea estilística para potenciar su debut llamado La Verdad. Un debut que bebe sin complejos ni contemplaciones (de Supersubmarina y Vetusta Morla sobretodo) de toda esa escena para craftear un debut sólido, disfrutable, con personalidad propia (por mucho que se asemeje a otros la voz de Fito Robles tiene un timbre basatnte peculiar) y capaz de hacerte disfrutar de lo lindo si tus pulsiones nacen de esa escena.

Puntuación 8

AATHMA (2017) Avesta

 

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Y sin movernos un ápice del underground patrio (y con esta van 6 dedicadas al subsuelo nacional de 7 entradas que he hecho este mes), hoy nos desplazamos virtualmente hasta Madrid capital, espacio físico en el que tiene su base de operaciones el power-trío madrileño formado por Juan (guitarra y voces), Mario (bajo) y Álex (batería), para introducirnos en los dominios del antiguo Imperio Persa, espacio abstracto en el que se sitúan los ancestrales textos sagrados con los que se completan las líricas de sus composiciones, para disfrutar de la cuarta refrencia musical de Aathma, banda a la que a estas alturas las etiquetas concretas y descriptivas quedan ridículas ante su incomparable estilazo de base metalizada.

Si en su momento podíamos catalogarlos como una banda de doom sin temor a equivocarnos, reforzado por discos tan definitorios como The Call Of Shivá (2009) o Decline...Towers Of Silence (2011), su tercera referencia en forma de mini-álbum llamada Deadly Lake (2015) nos daba atisvos de nuevos ingredientes en los que el sludge pasaba en ocasiones por delante del doom y comenzaba a apuntar maneras sobre el nuevo rumbo a tomar en lo que se ha acabado por materializar en su última referencia en formato vinilo titulada Avesta, un disco que retoma el testigo de su último ejercicio de estudio para reforzar, ampliar y mejorar con creces su inclasificable propuesta musical.

 

Con una concreción mucho más sólida en las composiciones, si algo hay que reprocharles del pasado es su momentánea dispersión en algunos de los temas, las composiciones de Avesta han ganado en grandilocuencia e inmediatez, algo que ayuda sobremanera a familiarizarse prácticamente al momento con un sonido que toma lo denso y lo abrasivo como sus bases formales a la vez que se convierte en un sonido expansivo y demoledor como nunca antes habían conseguido. Lo árido y desolador de sus desarrollos contrasta sobremanera con lo sumamente orgánico de su transmisión capaz de expresar con ella una contundencia inusitada. La experiencia de sus componentes les permite surcar las arrugas del tiempo de una manera tan personal y única como severa y heróica haciendo volar por los aires cualquier preconcepción que tuvieras sobre lo que te ibas a encontrar en Avesta.

 

Traspasando esas arrugas del tiempo como surcos en la piel del oyente y haciendo vibrar de placer el punto más oscuro del alma humana, su portada consigue preveer el sentiemiento de sorpresa y oscuridad que inunda tus sentidos cual niebla venenosa una vez te decides a darle al play y viajar con ellos por recovecos, texturas y lugares probablemente inexplorados por la mayoría, acentuando con convicción el carácter único e intrasferible de éste Avesta. Pero no solamente de sonido se nutre Avesta, el triple registro vocal que practica Juan (melódico-cavernoso-desgarrador) se convierte en el caballo de batalla imbatible de esta descomunal obra maestra dispuesta a poner patas arriba la escena nacional con el mejor disco de metal patrio facturado hasta la fecha del corriente 2017.

Puntuación 10

ERIC FUENTES (2017) Cemetery Of Virtue

  

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¿Qué pasa cuando Eric Fuentes va a Los Angeles de visita?, pues que una vez tomado el pulso a la ciudad y disfrutar de lo lindo, vuelve a casa con un delicioso Ep acústico de versiones bajo el brazo que quita el hipo. Grabado en el estudio de Tyler Humphrey en tan sólo 8 horas, Cemetery Of Virtue es un precioso y nostálgico homenaje a algunas de las bandas que marcaron la evolución musical e influencias de Eric (y muchos de nosotros) a lo largo y ancho de su crecimiento como músico y ávido consumidor de música. Las variantes estilíscas que conforman las bandas que ha versionado en el Ep (punk, emo, rock, indie, post-punk, pop) se funden y se diluyen bajo un mismo techo gracias a la innata habilidad de Eric para dotar a los temas de una personalidad y una calidad tan personal como única en todos los sentidos haciéndolas suyas irremediablemente.

 

Empezamos por Clean, primer tema recuperado del segundo disco de Samiam titulado Soar y editado en 1991.  Un tema que contiene una de las distorsiones de guitarra más cojonudas y reconocibles y que acaba convertida aquí en una delicada y visceral versión acústica que enamora prácticamente tanto como su original. Siendo un fan incondicional de los tres primeros discos de Samiam como soy (también del resto), esto es un regalo de los gordos. La original Outlive The Man, segunda de la lista, venía firmada por otra de esas bandas irresistibles y referenciales de los 90 llamada Sense Field y está sacada de su magistral tercer largo llamado Building (su último disco antes de la reunión a principios de la década pasada). Un disco que marcó a fuego su carrera y que fusionaba sin complejos la escena emo y punk rock con ese rollo rock alternativo tan en boga en aquellos días. Eric la ejecuta con una convicción y una belleza acústica irresistible para el disfrute extremo de mis pulsiones adolescentes.

 

Quizás la más siginificativa (para mí) y más trabajada del disco sea Red House T-Shirt de Shudder To Think, otra de esas bandas de los 90 tan referenciales como inclasificables dentro del rock sin etiquetas, prefijos ni sufijos. Tomando como punto de partida la canción Red House de (creo) el primer disco que editaron allá por finales de los 80 o principios de los 90, la sorpresa mayúscula que esconde la versión de Eric es que el tema se acaba convirtiendo en un alucinante medley en el que el tema Tee Shirt (de su laureado Pony Express Records de 1994) aparece al final de la versión para cerrar un tema que se nos presenta como una de las delicatessen musicales más  sorprendetes y metódicas de este Cemetery Of Virtue. Llegamos a la cuarta y nos encontramos con My Curse, tema extraído de aquel descomunal Gentlemen que los Afghan Wigs de Greg Dully firmaron en 1993. Siendo una de las bandas más infravaloradas e imprescinidbles de los 90 Eric le rinde su particular homanaje con un ejercicio acústico que casa a la perfección con la personalidad de la orginal y que aquí se convierte en la extensión y compañera perfecta de aquella.

 

Y llegamos al final con You've Got A Long Run de aquel lejano 2004 en el que los añorados Unfinished Symtahy firmaban su tercer largo. Una versión que ya pudimos apreciar en aquel Ep del 2005 llamado The Loveless Curse en el que aparecian algunas versiones acústicas de temas de los Unifinished en directo, aunque aquí se haya vuelto a grabar de nuevo dejándola más desnuda y convirtiéndola en una joya aún más deliciosa si cabe, además de que cerrar un disco de versiones versionando una de tus propias canciones es la repera. Dictámen final: un puto 10 como una casa de payés y el mejor Ep del año (al menos hasta la fecha) con mucha diferencia.

Puntuación 10

LOS PUNSETES (2017) ¡Viva!

 

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¡Los putos amos indiscutibles del sarcarmo nacional han vuelto!. Nacidos a finales de la década pasada a través de la autogestión y poniendo sus canciones a disposición gratuita en su web con licencias CC (Creative Commons) Los Punsetes, con sede en Madrid y con un nombre que sale de la inspiración del famoso Eduard Punset,es un cuarteto que no deja indiferente a nadie que se acerque a escucharlos. Con nada menos que 5 discos de estudio en su haber, fans de todos los calados metidos dentro de su movida (Patxi López entre ellos) y dotados de esa incorrección social tan punzante y desmedida como marca de la casa ineludible, Ariadna, Jose, Chema y Manu lo han vuelto a hacer, han facturado uno de los discos de pop más divertidos e irreverentes del año y, si se me permite decirlo, uno de los más divertidos, certeros, bailables y disfrutables de su discografía.

 

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Con frases tan desternillantes y amorales como -Viva el terrorismo, viva la guerra-, -viva el presidente, viva el gobierno-, -sálvese quien pueda y a la mierda con esta mierda-, -viva la violencia, viva la ira-, -viva la oficina, viva el trabajo-, -viva la miseria, viva la muerte-, sacadas del primer tema que además lleva el nombre del disco, o -despilfarro de dinero público, reforzando el pensamiento único-, -eso es lo que pienso de tu grupo, eso es lo que pienso de tu puto grupo-, -os pasáis a Garcilaso por el forro, todas las letras por el puto morro-, de la tercera titulada Tu Puto Grupo, o una de mis favoritas absolutas que reza -Voy a envenenar el agua, la que sale por el grifo, para llenar los botijos y que beban vuestros hijos-, -miedo, voy a hacer que tengas miedo, miedo como el que tengo yo- de la sexta titulada Miedo, creo que queda bien claro a lo que me refiero con su absoluta desfachatez e irresponsabilidad educacional.

 

Con la pulida e ideal producción del siempre interesante El Gincho como colofón a un disco que supera con creces a sus tres primeras obras, ¡Viva! se coloca a la altura de su anterior LPIV del pasado 2014 (con el cual consigueron facturar su mejor disco hasta esa fecha) funcionando como la perfecta extensión de aquel elevando sus incómodas formas líricas y puliendo cada vez más ese carácter indie musical tan agradable, chicletero y desprejuicidado de sus composicones. Todavía no me ha llegado mi copia física del disco (encargado está) pero si hay algo que les tenga que reprochar con su quinto disco de estudio es esa portada tan insulsas y fea que han escogido para presentarlo.

Puntuación 10

JOE CREPÚSCULO (2017) Disco Duro

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Han tenido que pasar nada menos que 10 años y 8 ochos discos de estudio para que, finalmente, haya flipado con la propuesta de Joe Crepúsculo. Habiéndole dado más de una oportunidad a este peculiar cantautor barcelonés en el pasado sin demasiado éxito, he de aclarar que no es que sus discos me parezcan malos sino que simplemente no acabo de casar con su interpretación y sus formas haciéndoseme bastante olvidable, el pasado Sábado durante mi fiesta de cumpleaños, en la que pinchamos sobretodo Los Punsetes, Los Ganglios y demás moderneces pop nacionales, Xavi me puso al tanto del último disco de Joe Crepúsculo acentuando sobremanera su disfrute y calidad. Pues bien, después de estar un par de días dándole a este Disco Duro sin descanso, he de decir que he acabado rendido a sus pies, veremos si yendo hacia atrás consigo el mismo efecto ahora que he entrado de pleno en su descarado universo pop de baratillo.

 

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Preñado a partes iguales de hitazos disco-funky, composiciones mega divertidas con las que no podrás parar de disfrutar sin complejos de sus sintes de mercadillo y líricas que nos tocan a todos muy de cerca, y temazos incontestables al más puro estilo baladones urbanos, canciones en las que lo bonito de lo cotidiano y familiar sacan a relucir el carácter más delicado y emocional de Crepúsculo, Disco Duro toma elementos del electro-pop, (sobretodo de lo hortera y lo macarra) para mezclarlos (sin abusar) con ingredientes del absurdo y el feísmo (Pisciburguer, El Dicho, Ojos de Conejo) de la misma manera que nos inunda con sonidos lo-fi marca de la casa y nos arropa con una personalidad arrolladora para craftear un disco prácticamente redondo en su totalidad.

 

Al parecer y según lo que he leído por la red, el disco encadena sus canciones (de la primera a la última) para englobarlas en una obra conceptual (el concepto del disco todavía no lo he pillado) consiguiendo un efecto que funciona a las mil maravillas incluso sin saber exactamente a lo que atenerse como concepto en cuestión (aunque creo que algo tiene que ver con los ritmos y los sonidos contagiados de un tema al otro). Descrito como Música Para Adultos que no puedes comprender (como yo antes no podía comprender), ha tenido que llegar su octavo disco de estudio justo en el momento en el que me estoy haciendo adulto (risa de fondo) y descubrir que todo tiene sentido y razón de ser con Joe Crepúsculo.

Puntuación 8

POWER TRIP (2017) Nightmare Logic

 

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4 años después de su contendente debut que nos dejó a todos con ganas de más (Manifest Decimation, 2013), el quinteto tejano llamado Power Trip vuelve al candelero con un disco que, al menos durante las primeras escuchas, parece que supera sobradamente a su debut volviendo a incidir en su arrolladora mezcla de thrash metal, punk y hardcore. Dotados de una capacidad superior a la media en prácticamente todos los aspectos, composición, portada, sonido y pegada, Nightmare Logic se erige como el mejor disco del estilo del año siendo incluso siendo capaz de comerse al (tampoco nada desdeñable) útlimo disco de Iron Reagan, el cual, como suele ser habitual en ellos, toma el camino de la comicidad para expresarse chocando de frente con la sobriedad y la seriedad de este Nightmare Logic.

 

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Con tan solo 8 temas y una duración que va poco más allá de los 30 minutos (los temas oscilan entre los 4 y los 5 minutos), Power Trip hace destacar sobremanera sus composiciones elevando el conjunto (ya de por sí muy destacable en todos los aspectos) con una producción absolutamente ideal que impregna el disco entero de una atmósfera oscura, peligrosa, sucia y decrépita (el efecto que lleva el sonido de la batería y el regsitro vocal suponen aciertos mayúsculos en la mezcla), resultando en un disco de corssover tan personal como intransferible.

 

Sin necesidad de copiar a nadie pero tomando como referencia  la escena crossover revival a modo de punto de partida, y sobre la que calculan sus moviemntos sin duda alguna, Power Trip sabe como insuflar cantidades ingentes de personalidad y carácter a un estilo del que, más allá de alguna que otra banda como Municipal Waste, Toxic Holocaust o los nombrados Iron Reagan, son de lo pocos capaces de coger al estilo por los huevos y ofrecer algo divertido y radical a partes iguales. 

Puntuación 8

RATA NEGRA (2017) Oído Absoluto

 

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Seguimos tomándole el pulso al underground nacional con el debut largo de Rata Negra. Experimentado trío madrileño curtido en la lindes del punk más áspero e incómoco y compuesto por Violeta al bajo y las voces y Fa a la guitarra, ambos salidos de Juanita Y Los Feos, y Pablo a la batería, procedente de bandas como USRR o Nueva Autoridad Democática. Editado el pasado Enero por el sello independiente La Vida Es Un Mus, lo que nos vamos a encontrar en Oído Absoluto (más allá del juego de palabras que conlleva) es un disco de punk prácticamente redondo (sea en el formato que sea) plagado de temazos incontestables y que rezuma personalidad, actitud y calidad por los cuatro costados.

 

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Presentados con un sobresaliente carácter tétrico, oscuro y siniestro, aunque para nada falto de humor negro y capacidad crítica, canciones como la segunda de la lista titulada Gente, con ese impagable estribillo que dice -Si tuviera un fusil... estaríais muertos-, la meridiana Por No Estar Sola o la penúltima Ellos Dicen, plasman a la perfección la personalidad de la banda funcionando como certeros ejemplos que se adhieren a una colección de hits automáticos con los que no podrás parar de mover tus pies y tu cabeza al son de su punk rock de cementerio en los poco más de 20 minutos en los que despachan los 12 cortes de este Oído Absoluto.

 

Una de las mayores bazas del disco son las infecciosas e hirientes melodías que lanza Fa con su guitarra a diestro y siniestro formando un cuerpo melódico que conjuga a la perfección con el  peculiar registro de Violeta y que entronca químicamente y de manera brutal con una base rítmica tan sólida y efectiva como el resto de elementos que conforman a los muy superiores Rata Negra. Es evidente que el punk patrio ha dado siempre grandes nombres (algunos de ellos tan legendarios como los añorados Eskorbuto) pero también es cierto que no es fácil encontrarse con una banda capaz de mantener un nivel tan alto en todos los temas como consiguen Rata Negra en su debut, y eso los hace más que dignos de mención y merecedores de éste 9 como un mausoleo familiar de grande.

Puntuación 9

MENDRA (2017) Tacho

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Después de que el screamo europeo fuera absorbido por la vorágine de bandas americanas para pasar a quedarse en emo solamente y más tarde acabar desvaneciéndose del todo en patrones pop de repetición cansina y radiable, el estilo quedó prácticamente huérfano de bandas de nivel. Pero como todos los estilos musicales son cíclicos, de un tiempo a esta parte bandas como La Dispute, Defeater o Touché Amoré han conseguido resucitar considerablemente la escena (aunque con un enfoque bastante distinto y actualizando la propuesta a los tiempos que corren) desde un punto geográfico concreto (EEUU) y con un estilo claramente deudor de sus propias raíces geográficas.

Todo esto me lleva a hablar de la banda que nos ocupa, Mendra. Una banda que toma el relevo de esa resurección estilística (aunque con sus propios referentes geográficos) y nos plantea una suerte de screamo personalizado que en vez de utilizar la vía del hardcore rudimentario más evidente y machacón, se lanza de cabeza a las distorsiones del post-hardcore más abrasivo y la visceralidad del punk sin complejo ninguno. Tacho, su debut en cinta para el sello catalán Saltamarges, funciona a la perfección como una bola de furia, rabia y visceralidad en la que caben retazos de estilos que convergen, se fusionan y se retroalimentan entre ellos para parir uno de los debuts más contundentes, sólidos e interesantes del año. Pero Tacho tampoco está desprovisto ni de melodía ni de belleza, lo que pasa es que hay que picar un poco sobre esa dura y cruda corteza  para adentrase en ella  y poder apreciarla en todo su esplendor, y cómo me gusta eso.

 

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Sombríos a su manera e incómodos y adulterados en sus formas, no resulta fácil extraerle todo el jugo a este Tacho en las primeras escuchas. Dato que, por otra parte, juega a su favor en todo momento haciendo que acudas a ellos en repetidas ocasiones y de manera continuada encontrándote prácticamente en cada ocasión con un disco nuevo, aunque cada vez más familiarizado con su sonido. Es de esos discos que tienes que ordenar poco a poco en tu cabeza para aprender a apreciar todos y cada uno de sus detalles. Cambios de ritmo a tutiplén, melodías distorsionadas que te dejan sin aliento, doble o triple registro vocal, subidones de escándalo, una portada que es puro amor y un power-trío que ha llegado hasta lo más profundo de mi corazón y de mis entrañas con tan sólo 10 escuchas, aunque ya llevo bastantes más.

 

Venidos de Barcelona y arropados por gente como los hermanos García (Víctor a la mastrización y Santi supervisando la grabación en los Ultramarinos), o Eric Fuentes (The unfinished Sympathy) y Jazz Rodríguez (Mourn) en sendas colaboraciones, Mendra ha sacado su debut con uno de los sellos emergentes más valiosos del underground catalán actual. Con referentes de escudería como Hurricäde, Anchord, Tano! o Please Wait (todos y cada uno de ellos imprescindibles y disponibles para escuchar desde el bandcamp del sello) el trío de Barcelona ha encontrado la parcela perfecta sobre la que edificar sus cimientos con unos vecinos entre los que se respira un aire de familia y hermandad digna de admiración (uno de los más claros indicativos es que la mayoría de los grupos del sello comparten componentes). Por cierto, tanto la portada (que ya lo he dicho pero lo repito) como lo de utilizar los tres idiomas en las letras (catalán, castellano e inglés) me ha parecido un acierto descomunal. Corred a por vuestra copia que por el momento solamente se han editado 80 unidades en cassette (aquí la podéis comprar).

Puntuación 9