Volvemos a uno de las patios de recreo musicales más frecuentados por mi persona, el rap me emociona y me divierte como pocos estilos, con uno de los mc's más fieles al underground, más versátiles y más impresionantes de la escena internacional. Hablamos de Aesop Rock, no confundir jamás con ASAP Rocky, quien nos ha entregado, con su séptimo disco de estudio titulado The Impossible Kid, su mejor obra desde los trabajosos días del Labor Days, su lejano e imbatible debut para Def Jux en el 2001, una de esas obras maestras atemporales del hip-hop de la década pasada.
Asociado desde su anterior largo (Skeleton, 2012) con el sello Rhymesayers Entertainment, propiedad de Slug y Ant ambos componentes del dúo explanetario Atmosphere quienes están a punto de lanzar su nuevo disco, Aesop Rock nos presenta un disco en el que produce, escribe y rapea sin necesidad de prácticamente nada de ayuda externa, dando como resultado un disco variado, divertido, dinámico y altamente disfrutable.
Las habilidades al micro de Ian Matthias Bavitz sobresalen prodigiosamente de manera brutal, no es por casualidad que está catalogado como el rapero con más vocabulario del planeta, del mismo modo que resaltan enormemente esos particulares ritmos hardcore tan trabajados y arreglados, provistos de diferentes capas emocionales, bases crudas, arreglos agradables y breaks marchosos, consiguiendo una combinación única y perfecta para sus complejas e indescifrables líricas dotadas de cabeza y corazón a partes iguales. Empaque y calidad al mismo nivel, un nivel muy por encima de la media.
Puntuación 9
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