El debut de este trío escocés afincado en el electro pop de miras bailables, ha ocasionado un buen repertorio de críticas positivas, por todo el mundo, encumbrándolo como uno de los mejores debuts del año y, porque no decirlo, estoy bastante de acuerdo si a lo que nos referimos es a la escena indie. No inventan nada nuevo, por supuesto, pero su nítida ejecución y la elección de la preciosa Lauren Mayberry para protagonizar sus más que jugosas composiciones, la inclusión de los samplers es también muy metódica, es una de sus armas más poderosas.
Producido por ellos mismos, con un sonido altamente sintético pero que gracias a la Mayberry queda impregnado sin remedio por un alma totalmente orgánica, su delicadeza y preciosismo a la hora de utilizar un camino electrónico sin ritmos asincopados e indescifrables, algo que está muy de moda, pero ellos tiran por la vertiente más conocida haciéndose valer en ella con una personalidad propia muy marcada.
Producido por ellos mismos, con un sonido altamente sintético pero que gracias a la Mayberry queda impregnado sin remedio por un alma totalmente orgánica, su delicadeza y preciosismo a la hora de utilizar un camino electrónico sin ritmos asincopados e indescifrables, algo que está muy de moda, pero ellos tiran por la vertiente más conocida haciéndose valer en ella con una personalidad propia muy marcada.
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