¿Me puede emocionar, soprender o simplemente interesar a estas alturas de mi vida un nuevo disco de Cradle Of FIlth?. La respuesta es clara y contundente, NO. Pero quien sabe exactamente porqué, además habiendo facturados unos discos tan mediocres últimamente como la orquestración aquella doble o la reedición de su primera maqueta a bombo y platillo, siempre que Dani FIlth y los suyos regresan al estudio, allí estoy yo para escuchar su descumal nueva obra de aires gótico-metaleros y valorarla desde un punto de vista real y con conocimiento de causa. Una cosa sí que voy a decir, me encanta muchísimo el título del disco, por mucho que se lo hayan fusilado a Sol y a Jordi del nombre de uno de sus cortos.
He de admitir que su single de adelanto, Right Wing Of The Garden Triptych, no me disgustó para nada, recuperando a unos CoF muy equilibrados, rudos y bombásticos, quizás demasiado para mi gusto pero aún así, muy correctos. Precedido por una clásica introducción instrumental dotada de unos violines y unos trombones absolutamente épicos, el disco se desarrolla muy en la línea del single, incluso aún más crudo y salvaje que en aquel, produciendo uno de los discos más enormemente descomunales, en cuanto a sonido y embergadura, que ha realizado el combo de Suffolk a lo largo de su historia.
El gran problema de los CoF actuales es que ya no son capaces de arriesgar, de innovar y mucho menos de sorprender a sus fans más antiguos, eso no quiere decir que a los nuevos fans no les encanten sus discos actuales, la calidad de algunos de sus últimos discos es indisutible sienda capaces de barrrer a la competencia de un plumazo, pero es indudable que a estas alturas la oferta dentro de su estilo, en el que hay que reconerlos como precursores, sobresatura el mercado de tal manera que se reparten la poca repercusión de la escena entre demasiados. Para mi, su último gran disco, que para muchos de los fans antiguos ya fue un desatino descomunal, fue el Thronography del 2006. Un disco en el que arriesgaron y, para mi, ganaron. Aunque sin duda estamos ante el mejor disco de los CoF desde los días del nombrado Thornography.
No hay comentarios:
Publicar un comentario