PAIN OF SALVATION (2010) Road Salt One

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Vivimos en una época en la que dada la cantidad de oferta musical que tenemos a través de internet suele pasar que en ocasiones no le damos el tiempo suficiente que necesita a un disco para madurar y convertirse en una obra magna después de infinitas audiciones, es fácil que si no te entra a la primera o a la segunda escucha lo dejemos olvidado en nuestro disco duro y accedamos a cualquier otro que nos resulte más gratificante y fácil de escuchar. Todo esto lo comento para dejar constancia de lo importante que es a veces tomarse su tiempo para entrar en un disco que en un principio nos puede parecer algo extraño, más viniendo de una banda que suele practicar una mezcla de rock y metal progresivo de infarto, pero que si le damos una oportunidad se puede convertir en una de las mejores y más emotivas sorpresas del año. Por razones obvias, la primera vez que escuché éste Road Salt One quedé bastante decepcionado, pero inexplicablemente y sin pensar demasiado en el tema iba acudiendo a él cada vez más a menudo hasta que finalmente lo he tenido que comprar original por qué se ha convertido en uno de mis discos del año.

Después de entregarnos un jugoso Ep el pasado año llamado Linoleum, -comentado en las antiguas Píldoras y dónde volvían a demostrar su buen hacer con el metal y el rock de carácter progresivo-, con el que ya se decidieron a darle ciertos aires más clásicos a sus composicones aunque sin dejar de lado en ningún momento la contundencia y los riffs pétreos marca de la casa, nada hacía presagiar que éstos suecos de trayectoria impecable se iban a transmutar en una especie de banda revival de los 70 recordándonos sobretodo a los grandes de la época como Deep Purple o Led Zeppelin de marcada base bluesera. Tengo que admitir que las primeras escuchas me dejaron un poco descolocado, después de todo, para una banda que ha basado el protagonismo de sus canciones sobretodo en las guitarras, se me hacía bastante extraño escuchar alguno de los temas incluso totalmente faltos de dicho instrumento.

La banda está compuesta por el cerebro compositor y motor de la banda Daniel Gildelöw, principal vocalista, guitarra, bajo, banjo y samplers, Fredrik Hermansson, que se encarga de los teclados y los sintetizadores, Johan Hallgren, a la segunda guitarra y a las voces y finalmente Léo Margarit que es el encargado de la batería y también de algunas de las voces. El disco es una verdadera obra de arte en la que la emotividad de la voz de Daniel y la sana obsesión por el sonido retro son sus mejores bazas. Me gustaría destacar la canción Sisters como una de los mejores del año, su impresionante sensibilidad y su épica controlada me han calado en lo más profundo de mi corazón, creo que me he enamorado, je je je. Me he comprado la edición limitada en digipack que contiene 1 tema extra, que casualmente es la intro del principio, y 2 de sus canciones en versión extendida además de una extensa composición de fotos en un libreto que casa a la perfección con el sentimiento de libertad y hipismo que tiene el disco.


Han anunciado una segunda parte del disco para Septiembre, de la que estoy bastante seguro no tendrá demasiado que ver con lo planteando en ésta, realmente no tengo ni idea, pero tengo la corazonada de que va a ser un animal totalmente distinto. Pienso que sería lo más intelegente para tener a todo el mundo contento, aunque tengo que admitir que si siguen por éste camino tampoco iba a tener ningún problema con ello. Ahí van un par de vídeos de temas del disco, Road Salt One en directo y Linoleum, que casualmente fue la única que apareción el anterior Ep y que es el tema que más desentona en el conjunto.