Spirtual Beggars es un proyecto personal del guitarrista Michael Amott (Carcass, Arch Enemy) que comenzó a principios de los 90 para demostrar la pasión de Michael por el hard-rock de la década dorada de los setenta. Bandas como Black Sabbath o Deep Purple son la auténtica bibilia y mayor influencia de este incombustible y cambiante proyecto del que el único amo y señor es Michael Amott.
Con una variación eterna de formación, la banda está compuesta actualmente por el bajista Sharlee D’Angelo (King Diamond, Witchery, Arch Enemy), el teclista Per Widberg (Opeth), el batería Ludwig Witt (Grand Magus, Shining), y el vocalist Apollo Papathanasio, quien se apunta un segundo tanto consecutivo con los Beggars después de que en el anterior álbum comenzara su nueva andadura junto a ellos.
Que los Beggars han facturado discos de contrastada calidad a lo largo de sus más de 20 años de historia, es algo indiscutible, que ellos fueron de los primeros en impulsar ese revival de la década de los 70 que tan en boga está últimamente, es más que evidente, pero que nunca han conseguido la más que merecida repercusión que se han ganado a fuerza de riffs, sudor y sangre a lo largo de estos años, es también un dato a tener muy en cuenta.
No creo que sea así, pero si algún disco de los Beggars tiene que impulsarlos al estrellato, ese es sin lugar a dudas este Earth Blues. El momento momento musical actual, con todas las alabanzas que reciben actualmente este tipo de grupos, y unas composiciones que son capaces de volarte la cabeza desde la primera a la última, tanto sea a base de riffs cavalgantes, medios tiempos insuperables o baladas desérticas, hacen de este Earth Blues la obra más disfrutable y completa de los Beggars hasta la fecha.
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