Llevo varias semanas dándole cera a dos discos de los 90 que, desgraciadamente, dejé pasar por falta de atención y, probablemente, también por falta de rodaje. Me explico, uno de ellos es este Our Problem de los ingleses Iron Monkey. Disco del cual me acuerdo perfectamente por la anécdota que me pasó con él. Cuando lo compré en cd en el 1998, año de su salida bajo el eminente sello Earache, me pareció el mayor despropósito musical que había escuchado hasta el momento. Gritos sin demasaida coherencia y unas guitarras tan mal graduadas (Andy Sneap a los mandos) que mi limitada cultura musical de finales de los 90 me impedian ver más allá.
Pero como hoy en día se hace tan fácil recuperar un disco al momento para saber si realmente te gusta ahora o no, Spotify, Torrent, descargas directas, compras ganga en Amazon.es, después de recuperar este Our Problem por Spotify y comprarme su reedición en vinilo a precio de risa, he de admitir que lo que consiguieron crear estos mastuerzos de Nottingham a finales de los 90 fue, sin lugar a dudas, uno de los mayores logros metaleros de la década.
Empezando por su portada-mural, creada por Mike Diana, en la que podemos ver a un mono torturado salvajemente, cuerpos desmembrados, cristos crucificados, y demás parafernalia siniestra, ya podemos preveer que lo que aquí nos espera es un viaje escandalósamente brutal y salvaje. Una vez le damos al play, la cosa se pone aún mejor con un sonido tan trabajado en los graves y descarnado en ejecución que una vez quedamos atrapados por su brutal tormenta de riffs imbatibles nada puede sacarnos de ella.
Pero está claro que lo que mejor representaba el espíritu salvaje y desfasado de los Iron Monkey era su cantante Johny Morrow, quien murió la década pasada, y su desquiciado y desgarrador registro. Un disco que sabe poner toda la carne en el asador con el sludge como buque insignia pero que combinaba lo mejor de cada casa para empaparse en stoner, doom, crust y punk y esputar una de las mayores obras maestras del metal a todos los efectos.
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