Empieza la semana y sin nada nuevo en el horizonte digno para ser nombredo en este exigente espacio virtual. Si que es verdad que tengo en la recámara el debut de los Atoms For Peace, nuevo proyecto de Thom Yorke, Flea y Godrich, pero después de varias escuchas me ha acabado aburriendo como una ostra y por no ponerlo a parir me lo salto. Pero bueno, para mi no es difícil acudir a cualquier discazo de antaño que todavía no haya mentado por aquí, y el elegido para esta vez, cuidado con esto que estamos hablando de uno de los 10 mejores discos de rap de toda la historia, ha sido el segundo súper-largo de la Wu-Tang Clan llamado Wu-Tang Forever, algo de lo que algunos estamos contetísimos de que todavía sea una realidad.
Mi favorito de ellos es, y será por siempre jamás, su debut Enter The Wu-Tang 36 Chambers, pero he de admitir que su mejor disco hasta la fecha, el más elaborado, cuidado y estudiado, es sin lugar a dudas este Forever. En un momento en el que el colectivo estaba en la cresta de la ola, varios de sus miembros más emblemáticos ya habían arrancados sus lustrosas carreras en solitario y RZA estaba considerado el Dios de los ritmos más originales, llegó este Forever con un total de 27 temas expandidos en prácticamente 2 horas de música insuperable resultando en el disco doble más gordo de la década.
Forever rompió moldes, tanto en la escena como en el propio grupo, RZA se convirtió en un tipo mucho más accesible con sus ritmos, a los que inundó con evidentes sonidos traídos del funky y del soul, y el colectivo se volvió mucho más reflexivo y personal en sus rimas. Una personalidad más profunda y seria, más concienciada y, por supuesto, mucho más profesional. 4 años dan para mucho y la calidad y las hablidades del combo se pusieron simplemente a un nivel inalcanzable para el resto de mortales.
El disco llegó al número 1 en la primera semana de su lanzamiento y ha llegado ya a la astronómica cifra de más 8.5 millones de discos vendidos. Nombrados por varios, entre ellos yo, como el mejor combo de rap de toda la historia y con la suerte de que los vamos a poder ver finalmente, aunque sea sin el difunto ODB, en el próximo Primavera Sound, mi banda número 1 para ver en el festi, he de admitir que voy aconseguir alcanzar uno de mis sueños musicales más ansiados desde hace más de 15 años.
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