Ni en la mayor de mis pajas mentales me hubiera imaginado nunca una asociación tan sorprendente y ecléctica como la de los japoneses Boris con el carismático Ian Astbury (The Cult, The Doors, Unkle), espero que ésto no sea un caso puntual y se quede en una mera anécdota porqué escuchada la enorme química que tienen estos titanes juntos se me hace la boca agua solo de pensar que en algún momento podría caer un disco largo a raíz de ésta colaboración. Seguiré soñando pero mientras tanto voy a continuar disfrutando de éste auténtico diamante en bruto que nos han entregado sin previo aviso, corto pero intenso como pocos los cuatro temas que ocupan el Ep son obras maestras indiscutibles del rock libre y sin ataduras de ningún tipo, las dos personalidades (Boris+Ian) colisionan frontalmente formando un precioso crisol de emociones y texturas perpetradas con un pasión y una convicción simple y llanamente inalcanzable para el resto de los mortales.
El disco empieza con Teeth And Claws, una pieza que dura 5 minutos y que nos presenta a unos Boris mucho más enraizados en la composición tradicional del tema aunque con un montón de efectos y capas sonoras que junto con la voz del gran Ian se convierte en un auténtico orgasmo musical elevado a la enésima potencia. El nirvana sonoro continua con We Are Witches, el tema más duro y oscuro del disco con un marcado riff que se hace el protagonista del tema y un Ian de nuevo al tope de sus posibilidades con unas tonalidades que me ponen los pelos de punta. La cosa pega un sopresivo vuelco cuándo en el tercer tema titulado Rain (versión de los propios The Cult) no es Ian quién pone las vocales sino la fémina de los Boris bordando un tema que gracias a su voz y a los maravillosos sonidos que la envuelven ha cogido una nueva dimensión, más grande, más espacial, más Boris y equiparable totalmente a la original, impresionante. Finalizan el Ep con Magickal Child, un tema muy reposado e introspectivo dónde el combo deja fluir la emotiva épica que desprenden hasta cotas impensables elevando el Ep a la categoria de único e imprescindible.
La conclusión final es que estamos ante el mejor Ep del año con diferencia y capaz de competir con muchos de los grandes discos de éste año sin despeinarse ... enormes.
Estos tíos son unos genios. Lo ulotimo ya es componer con otros autores. Tienen merecido su puesto como la mejor banda japonesa. Le pegaremos unas cuantas escuchas a este disco, gracias men!
ResponderEliminarConclusión final: Pedazo de ep y un millón de gracias por compartirlo.
ResponderEliminarEn serio. Vaya maravilla más cojonuda.