Hoy toca algo sencillo y directo a la yugular, nunca mejor dicho viniendo de este cuarteto de zombies descerebrados y con unas enfermizas ansias de devorar vuestras seseras, ya que después de estrujarnos las pocas neuronas que nos quedaban con el tecnicismo espacial de Vektor y los ocultismos ambientales de The Devil's Blood el debut de los austríacos Zombie Inc. os va a parecer un juego de niños, jajaja. Una vez comprobado que no me he encontraba ante un nuevo pseudo-clon de los Mistfits o, por cercanía en el tiempo, de los Murderdolls tengo que decir que el sangriento cometido de este terrorífico álbum no es otro que el de despellejarte vivo a ritmo de death metal a la old school, y ese es un placer carnal al que pocas veces me puedo resistir.
Escuchándolo en el Spotify sin más información que el gracioso nombre del combo y su título escocgido para el disco me lo he escuchado tres veces del tirón hasta decidirme a buscar información por la red. Oh, grandiosa red de redes que das alegrías a toneladas, jajaja, digo esto por qué una vez puesto en materia me he dado una de las sopresas más agradables del año. El combo está compuesto nada menos que por Martin Schirenc, cantante de uno de los combos de death metal austríacos con mayor solera como fueron los Pungent Stench, el guitarra es Wolfgang Rothbauer adscrito a bandas como Disbelief, Eisblut, In Slumber, Thirdmoon o GodHateCode, a la otra guitarra tenermos a Gerald Huber de Collapse 7, al bajo a Daniel Lechner de The Cascades y Lacrimas Profundere y a la batería al imparable Tomasz “Nefastus” Janiszewski de los infames Belphegor, Fleshcrawl y Debauchery, ¿ hay algún amante del death metal que se precie que se pueda resistir a tal line-up?
Pero es que además la cosa no acaba aquí, jejeje, la temática del disco, como es bastante obvio, es sobre zombies, ataques, descuartizamientos, infestaciones varias y demás visiones apocalípticas, que sin ser algo novedoso ni original a mi personalmente me sirve de punto extra ya que es un tema que me parece más que correcto para estar ambientado dentro del death-metal y si encima la masterización del disco ha corrido a cargo del omnipresente Dan Swanö en sus ya míticos Unisound Studios de Suecia el paquete acaba con un notable alto como poco.
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