Mucho he esperado y ya no espero más, siento presentarme a estas alturas de la película con un disco a ésta calidad tan pobre (192Kbps), pero como he dicho me he cansado de esperar, de buscarlo por la red a mejor calidad sin suerte, y teniendo en cuenta que la ocasión lo merece sobradamente he decidido que era mejor hacerlo a esta calidad que no hacerlo. También os he decir, por si alguien dispone de él, que en el Spotify Premium lo tenéis a calidad perfecta sonando como si de un guateque sacado de la mismísima peli de Peter Sellers se tratase y os puedo garantizar que es una aténtica gozada con la que no podrás para de mover tus pies.
Para todos los amantes de los sonidos modernos, sintéticos, originales y alucinógenos os tengo que decir que ya os podéis apear de este tren con destino al pasado ya que lo de Sallie Ford y sus Outside Sound recoge con orgullo la esencia del rockabilly de los 50 y lo rememora de la manera más gloriosa y respetuosa que os podáis imaginar en este ineludiblemente bailongo y refrescante Dirty Radio con el que me han conseguido conquistar a la primera sin tan siquiera ser devoto de este peculiar estilo, eso es algo que dice mucho de ellos y de su indudable calidad.
Si que es verdad que su natural sonido vintage y la elección de los instrumentos, ese contrabajo y las guitarras a lo Elvis Costello son simplemente deliciosas, juegan un papel más que notable en el desarrollo festivo de las pegonas composiciones a prueba de bombas que dispone la banda, pero su mayor baza es sin lugar a dudas ese alarmante registro del que disfruta nuestra nueva musa llamada Sallie Ford deudor de grandes divas como Billie Holyday o Ella Fitzerald con las que ha sido numerosas veces comparada.
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