Se ha filtrado, hace ya días, pero resulta que su edición física, ya que la digital ha sido adelantada por la gente de Season Of Mist después de que se filtrara el disco, está prevista nada menos que para el 3 de Septiembre. Era de esperar, algo tan gordo como esto, le pasa un poco al de Carcass, se esperaba con los brazos abiertos y el corazón negro entre la parroquia metalera más extrema y experimental. Después de 12 años sin publicar un disco largo de estudio, Luc Lemay ha decidido rearmar la mítica banda de death metal técnico y experimental por excelencia con tres adiciones completamente nuevas.
Kevin Hufnagel a la guitarra, Colin Martson al bajo y John Longstreth a la batería han sido los elegidos para darle forma a este impasible e impecable Colored Sands. Un disco que, si en un principio nos puede parecer algo alejado de la filosofía de la banda, a medida que te adentras en él se convierte en la perfecta y más lógica evolución del sonido y el estilo del combo canadiense. Orquestado por Lemay, sus compañeros también han contribuido en la composción de sus partes para el disco, exponiendo una variedad ambiental capaz de engrandecer las composciones sobremanera.
Mucho más asentado en el progresivo que en el terreno experiemental, en palabras de Lemay el disco está inspirado en Opeth y en el álbum The Incident de los Porcupine Tree, con los que nos guarda más relación que su carácter progresivo en ambos casos, pero está bien que la inspiración de Lemay venga de dos pilares tan imprescindibles del estilo, más aún cuando, tanto uno como el otro, saborearon la gloria posteriormente a los propios Gorguts.
Si en su día su actual legado inició y confirmó todo un movimiento de bandas ávidas de nuevos, y aún más brutales y complicados, límites dentro del death metal, ahora vuelven a ser capaces de darle esa necesaria, imprescindible diría yo, vuelta de tuerca al estilo para imponerse como los únicos e imbatibles amos del mismo dando una lección magistral a las infames copias inspiracionales que surgieron de ellos. Alma, por muy negra y siniestra que sea, es lo que le hace falta al estilo como el comer, y de eso van sobrados los nuevos Gorguts en este Colored Sands. Postulando a mejor disco del año.
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