Seguimos aniquilando neuronas y sin salirnos de los preceptos del metal extremo en sus mejores representaciones hoy venimos con uno de los regresos más sonados, y más deseados por un servidor, en la escena death metal mundial con los que fueron uno de los más importantes y significativos combos en el estilo a finales de la década de los 80 liderados por el mítico Chris Reifert y a los que, bajo mi punto de vista, nunca se les dió la impotancia merecida. Desde la soleada California han regresado mis adorados Autopsy con un disco capaz de ponerse a la altura de sus pasadas y valiosas obras.
El tándem Reifert-Collares vuelve a demostrar una compenetración y una capacidad creativa desbordante recuperando por completo ese personal e inimitable sello que siempre ha marcado las composiciones de los Autopsy. Un demoledor amasijo metálico en el que el pútrido y desespeado registro de Reifert es el absoluto protagonista del desfase aquí hay cabida tanto para el death mas gutural y putrefacto como para el doom, el hardcore o el punk haciéndonos retroceder en el tiempo a los años dorados de los mejores Autopsy, una autényica gozada.
Con un breve pero más que intenso legado capaz de superar con creces en calidad al de muchas y reconocidas glorias del estilo que simplemente se limitaron a copiar en más de una ocasión las obras referenciales de este imprescindible combo la única pega que le puedo poner a esta gloriosa reformación de los Autopsy es la posible desaparación de los también impresindibles Abscess en los que tanto Reifert como Collares seguieron su camino después de disolver a mediados de los 90 a los Autopsy. Siguen manteniendo su aura de leyenda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario