Dos días llevo dándole caña a lo nuevo de Sergio Rodriguez, uno de los mc's con más alias del país, también conocido como Hate, Odio, Sho Hai, Maestro Sho Hai, Yuen Hsiao Tien, El Rey De Las Cantinas, Gran Mago Beodo, El Puma o el Heavy Del Rap, sobrenombres ganados a pulso a lo largo de una carrera que empezó hace ya 15 años junto a los intocables Doble V, el combo de rap más tocho que ha salido de este país, y que finalmente han decidido hacer un parón de las interminables giras que resultan de cada clásico instantáneo que sacan para realizar cada uno por separado sus ansiados debuts en solitario.
El primero en hacerlo ha sido Hate y me sabe fatal decirlo la verdad pero con todas las espectativas que tenía puestas en este redondo tengo que admitir que se han desinflado bastante después de las primeras escuchas. Uno de los fuertes de Hate ante el micro son sus sobradas y ordinarieces construidas desde el lado más enfermo de la psique humana, rimas tan irracionales y desquiciadas que nadie ha conseguido igualar el humor cafre y siniestro que gasta este mostruo del rap, algo que aquí brilla por su asencia. Adoptando un carácter mucho más reflexivo y serio el mc de Zaragoza ha conseguido un disco, por mucho que me pese, demasiado normal. Puede que esté hablando más mi decepción que mi cabeza fría pero no hay nada aquí que valga la pena destacar dentro del nivel que debería ofrecer el disco.
Una vez soltada toda la mierda que llevaba dentro tengo que decir que el disco no es malo en absoluto, con el mínimo esfuerzo que hace Hate en el disco es capaz de comerse como poco a la mitad de los mc's del país y cuando se pone (que lo hace en algún tema) es absolutamente imbatible, pero como ya he dicho el nivel mostrado se queda corto para un rapper de su talla. El disco sigue una marcada línea tranquila tanto en los beats como en las rimas con un fuerte componente del hardcore contando con algunas de las celebridades más importantes del rap patrio como sus hermanos de los Violadores que no podían faltar a la cita.
Nada más que decir, una pena pero es así, creo que el rap patrio está sufriendo desde hace años un parón en la creatividad por parte de los más antiguos solamente remediado gracias a la fuerza y la ilusión de las nuevas generaciones que a este paso se comerán a los abuelos... me voy a ganar una de palos por esto que no veas.
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