El apocalipsis se ha materializado. La noticia de que dos de mis bandas favoritas de la escena metal extrema se juntaban, el ayer y el hoy, al antes y el después, la experiencia y la actualidad, se convirtió en una de las mayores motivaciones del año. Y finalmente, el split perpetrado por los padrinos del grindcore, Napalm Death, y los visionarios del metal hardcorizado, Converge, es ya una realidad.
El split lo pone en circulación la americana Deathwish Records, aunque esperemos lo podamos pillar en alguna distro en la que no haya que cruzar el charco ya que los portes son realmente abusivos, y se compone tan solo de 4 temas. Pero hay que admitir que viniendo de tales eminencias del metal la calidad está asegurada y aunque se haga breve la escucha es de obligada compra para cualquier coleccionista de vinilos.
Los primeros en hacer resonar el infierno es el cuarteto de Massachusetts con un nuevo tema llamado No Light Escapes, el cual ya habían probado en directo, y del que todavía no sabemos si estará también incluido en su próximo e inminente nuevo disco. La sorpresa la dan en el segundo tema con una versión del clásico de Entombed Wolverine Blues, no digo más.
De la segundo cara poco vamos a decir más que el primer tema de Napalm, Will My Mouth, está claramente en la línea grind-core de la banda, y el segundo, No Impediment To Triumph (Bhopal), se apoya más en su vertiente lenta y experimental con unas letras inpiradas en la tragedia del Gas Bophal de 1984. Sin lugar a dudas, estamos desde ya ante una pieza histórica y mítica a partes iguales, imprescindible como pocos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario