El power dúo de Vancouver más enérgico y fiestero de los habidos y por haber, estamos hablando de los ineludibles Japandroids, ha tenido el buen gusto de facturar un disco de lo más molón, cañero y visceral, simplemente con la excusa de querer seguir girando con sus incendiarios y reveleradores shows a lo largo y ancho del planeta, dato por el que estamos enormemente agradecidos.
He de admitir que no consiguieron llamar mi antención con ese sonado debut que sacaron en el 2009 bajo el nombre de Post-Nothing, ni tampoco su No Singles del 2010 consiguió que me convirtiera a su religión, aunque con ese si que consiguieran llamr mi atención. Pero lo que han conseguido esputar en este Celebration Rock ha superado con creces todas mis expectativas y de repente se ha converido en una de mis bandas favoritas del momento y su nuevo disco en uno de los grandes del año.
Por supuesto que ahora me arrepiento enormemente de haberlos visto en el pasado Primavera Sound, pero no se puede estar en todo. Su tercer disco de estudio ha sido registrado en directo en el estudio de grabación y su sonido supera con creces lo hasta ahora mostrado. Su mezcla de rock clásico y actitud punk ha conseguido apoyarse lo justo en el pop para engancharme hasta las trancas con este Celebration Rock.
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